sábado, 22 de agosto de 2009

22 es mi número de suerte canta Calamaro.

Recuerdo con claridad la primera ocasión en la que escuché a Calamaro. Yo estaba en una ciudad del Estado de New Jersey en un curso de inglés. Por aquél entonces, no había cumplido los 12 años, los cumpliría días más tarde y aún en país extranjero.

Una familia americana maravillosa había compartido su hogar conmigo. Mi habitación antes de llegar yo era lo que ellos llaman living room y nosotros sala de estar. Era una sala de estar peculiar porque tenía una bicicleta estática y también una elíptica (que para aquellos que estéis poco familiarizados con el gimnasio, es una máquina que acompaña el movimiento de tus piernas cuando éstas hacen el amago de correr). Además, para hacer posible mi descanso, había una cama en el centro y una cortinita aislaba la room del resto de la casa. La cortinita pretendía darme intimidad, pero era fácil de vulnerar, tanto que un día me desperté de la siesta rodeada de unos cinco teenagers (mi hermano americano y unos amiguitos) que sentían curiosidad por la Spanish siesta, o por el bicho raro que estaba durmiendo a esas horas.

La habitación también tenía una minicadena, pero a ese viaje yo no había llevado nada de música porque no tenía aparato propio con el que escucharla (días más tarde y con ocasión de mi cumpleaños, amigas españolas que también estaban haciendo el curso me regalarían un discman, que aún conservo, pero al que el mp4 ha arrinconado actualmente). Una de estas chicas que me regalaron el discman, Bea, de Logroño, me dejó dos cassettes (uy dónde queda el cassette ya, lo mató la obsolescencia tecnológica; el tiempo pasa, nos vamos haciendo tecnos, que diría el propio Calamaro), uno de ellos contenía bandas sonoras míticas (por ejemplo, la de El piano) y la otra era El Salmón CD1 de Calamaro. Las dos cintas me encantaron.

El espíritu rebelde de El Salmón se apoderó de mí y dedicaba mi tiempo libre en la casa (excepto las horitas en la piscina) a poner a todo volumen este disco, sabiendo que nadie más que yo podía entender la letra.

Cuando volví a España no tardé en comprarme los cinco discos de El Salmón, que aunque sepa de manera objetiva que no son gran cosa (por no decir algo más feo) a mi me encantan.
Y tuvo su parte buena conocer a Calamaro con El Salmón, porque si te gusta El Salmón, todo lo demás que haga Calamaro deberá gustarte, en principio, porque será mucho mejor, jaja (excluyendo El palacio de las flores, que supuso los 20 euros peor invertidos de mi vida).

Os dejo mi canción favorita, Paloma, que es la que cierra todos sus conciertos.

5 comentarios:

  1. No había escuchado nunca la canción, y creo que me ha gustado más con esa pequeña "historia personal" detrás. Me ha recordado a lo que me pasó con Sabina y Madrid hará poco más de un año.

    Por cierto, tu sección de "películas que merecen ser vistas" me parece una pedazo de idea. Intentaré echarle un ojo a las que aún no conozco ;)

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  2. Me alegro de que te haya gustado la canción, Desilusionista.

    En cuanto a la sección de cine, si hay alguna película que te gusta especialmente y no aparece en la lista, se aceptan sugerencias (esto lo hago extensivo a cualquier persona que se pase por el blog)...

    Un saludo

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  3. Hay que reconocer que tuviste suerte a la hora de empezar con El Salmón, porque lo cierto es que es infumable.
    La escena de la Spanish Siesta es algo bastante surrealista xD

    PS: Yo te voy a recomendar dos películas. La primera es una española muy, pero que muy atípica: "3 días". Narra una historia de una familia de la España profunda de los setenta marcada por un crimen, bajo el prisma de un inminente impacto de un asteroide [sí, suena raro, pero la película es algo increíble, con un Víctor Clavijo excepcional y lo del asteroide la verdad es que algo totalmente secundario]
    La segunda es "conversaciones con mi jardinero". Una francesa del 2007 que cuenta la historia de un pintor parisino que vuelve a su pueblo de la infancia después de labrarse un nombre en la capital. Éste contrata a un jardinero para llevar su huerto que resulta ser su viejo amigo de la época del colegio y el resto de la película gira en torno a como indica el título, las conversaciones que mantienen entre ellos. Posiblemente, para mí, la mejor película de ese año.

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  4. Gracias por las recomendaciones, zionenllamas. La de "3 días" no me suena, la verdad; el argumento es un poco rarito, pero algunas de las pelis que más me gustan podrían calificarse como extrañas (véase Dead Man, jeje).
    En cuanto pueda las veré y ya te diré qué me parecen.
    Un saludo!

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  5. En realidad creo que es un disco con unas 5 buenas canciones y dos o tres muy buenas. Pero el problema es que son 103...Pasa algo parecido con el White Album de The Beatles.

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