Por casualidad hace unos días encontré, envuelto en hojas de periódico ya amarillentas, un reloj de sol que hice con arcilla hace unos cuantos veranos.
La impaciencia es uno de mis muchos defectos y, en aquel caso, se tradujo en distancias erráticas entre los números, diferencias en el tamaño de las cifras y varios desconchones torpemente remendados.
Desde entonces, me he estado preguntando si realmente se puede denominar “reloj de sol” a un objeto toscamente moldeado en barro que, desde su nacimiento, fue condenado a las sombras.
Imagen de la web estecha.com.
Buenooooo, a ver....
ResponderEliminarCon un poquito de buena voluntad, torciendo la cabeza, rectificando mentalmente la sombre y tirando los dados se puede uno acercar a la hora aproximada con un error máximo de + - 5 horas.
Muy bonito eh, y muy práctico.
:P
Besos.
A lo que tú haces le puedes denominar como quieras, que para eso es tu obra. Otra respuesta merecería la pregunta de si realmente sirve para cumplir la función para la que fue creado... En todo caso, nunca logré aprender a leer un reloj de sol (limitaciones de una. Ojalá fuera la única...)
ResponderEliminarBesos, Lucía
Jeje. Bueno, nunca lo probé, pero un sesgo de cinco horas me parece excesivo, quizá 30 minutos...jeje. Y sé de gente que teniendo reloj de pulsera, perfectamente en hora, llega tarde ese tiempo o incluso más.
ResponderEliminarBesos :)
Es increíble lo que hacen esas cosas que encontramos y entre más amarillo esté el papel, más nos llena de recuerdos y hasta de ilusiones, pues marcó una época en nuestras vidas. Creo que su función no es lo relevante sino el tiempo, tu creatividad en la esencia que construiste. Además no sé, yo lo veo muy lindo! Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarYo es que siempre he sido un manazas en general para las manualidades, así que tu historia del reloj de sol me suena un poquito...
ResponderEliminarPues si Lucía en ese concierto del 2005 vi a Mr Calamaro con la Bersuit. Pero mi primer concierto fue en el 1999, cuando hizo la gira del Honestidad Brutal y yo era un jovencito de 18 añitos...La de tiempo que ha pasado, en fin...
Y a mi también me quedan unos cuantos conciertos de este hombre...
Abrazotes
Bueno, ten en cuenta que el tiempo es nuestra perdición, es lo único capaz de hacernos desaparecer sin necesidad de ninguna desgracia.
ResponderEliminarComo cantaria alguien a quien conozco "...el tiempo se hace pesado, en las manecillas del reloj..."
Mejor lo guardamos de nuevo y vivimos un poco, no crees??
Besos atemporales
Pero a ver, los relojes que marcan las horas son los peores de todos ¿o no? Nunca traen nada bueno. Mejor guardar los relojes de sol en la sombra, y ya está, una preocupación menos.
ResponderEliminarMe quito el sombrero :p
Has probado a encender la punta!?
ResponderEliminarQuizá era un incensario góndola... :P
P.D.: Muy de acuerdo con el comentario de DANI, mejor guárdalo de nuevo y a vivir !!
Un beso, Lucía.
Es como un objeto frustrado por las circunstancias no? "Sin tí soy como un reloj de sol condenado a la sombra"... Es una linda frase dramática para una canción... Es cursi pero creativa ...jaja! Me encantan esos objetos extraños e inútiles... Yo tengo uno de arena que me compré... Y está en la misma que tu pobre reloj de sol.... Si la adapto a frase cursi de tema sería .. "Sin tí soy como un reloj de arena que nunca ha sido dado vuelta"... jaja! En fin, estoy con mi día estúpido, en el mes siempre tengo uno... Un abrazo grande,que tengas un buen día... ;)
ResponderEliminarCustión de semántica, Lucía.
ResponderEliminarUn abrazo, espero que estés de lujo.
eres una carcelera impasible o una diosa imperfecta.
ResponderEliminar(menos mal que las palabras que creas quedan exentas de las sombras)
biquiños
No lo sé Lucía sí con sus desconchones y varias heridas te puede servir como reloj de sol, pero ha estado súper bien rescatarlo de las sombras y devolverlo a la luz
ResponderEliminaren días d calor como me gustaría q el sol se dispersara como esos granitos de arena
ResponderEliminarBueno... si tú hiciste un reloj de sol, es un reloj de sol. Lo demás... es secundario, mujer.
ResponderEliminar:)
jaja creo que la única forma sería poniendolo en acción, total lo errores mientras no sean muy groseros no importa, la gracia es tener una idea aproximada del tiempo.
ResponderEliminarUN placer andar de regreso por acá Lucía, cuando uno se va muchas veces se olvida de lugares lindos como este.
Que andes bien
un reloj de sombra no vendria nada mal!!1 lo podrias hasta patentar!!! un abrazo!
ResponderEliminarTe contaré una anécdota: en un pueblo de la costa catalana, hicieron un reloj de sol para el ayuntamiento del pueblo y, luego, para que no se estropeara, le pusieron un toldo, jajajaja
ResponderEliminarNo veas el cachondeo de la peña....
No sé si te servirá de consuelo la historia pero igual sí te hace sonreír.
Un abrazo, preciosa.
Precisamente por ese error el reloj es perfecto, pues marca lo voluble del tiempo, la inexactitud de lo que debería ser exacto...
ResponderEliminarPS: M.O. son las siglas de Modus Operandi. Me alegro de que te haya gustado
yo soy impuntual por naturaleza, asi que no me viene mal un reloj así, pero más me gusta cuando es modelado por las manos de alguien.
ResponderEliminar:)
A donde va a parar tantos errores... cerca del lugar donde vio, descubrieron un depósito inmenso de anforas defectuosas de la antigua Roma... de la misma forma se comporta la vida...
ResponderEliminarEsas pequeñas imperfecciones le dan una identidad propia, la de su autora, y seguro que funciona de maravilla.
ResponderEliminarSaludos.
Será cuestión de ver el lado pragmático... Eso sí, ya nos contarás si funciona.
ResponderEliminarBesotes
Los relojes de sol funcionan en los días grises? Yo también soy impaciente, quiero que pase el invierno...
ResponderEliminarSaludos.
Chueco o no, tocayo tuyo en eso de la impaciencia, me gusta el reloj.
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